Encuentro Barcelona Feb2013

Encuentro con Rupert Spira - Barcelona, 15 de febrero de 2013 - Transcripción de los diálogos

Advaita
No-dualidad
70 páginas
Origen: https://datelobueno.com/
Rupert Spira

Primer diálogo - 15 de febrero de 2013

Rupert Spira: Sé consciente del espectro total de tu experiencia, y cuando hablo del espectro total de tu experiencia me refiero a la mente, el cuerpo y el mundo, deja que cada uno de ellos aparezca tal como es, instante tras instante.

Si miramos un poco más de cerca, ¿a qué nos referimos cuando decimos mente, cuerpo y mundo?

Por mente me refiero al pensamiento o la imagen presentes. Sé consciente del pensamiento o la imagen presente; no tienen importancia acerca de qué sea este pensamiento o esta imagen.

No intentes cambiar o manipular tu experiencia en modo alguno, y si te das cuenta de que estás intentando cambiarla o manipularla date cuenta que también eso es otro pensamiento.

Si nuestros ojos están cerrados todo lo que conocemos del cuerpo es la sensación presente.

Dejadme explicar qué entiendo exactamente por la palabra sensación: Una sensación sería el hormigueo de la planta de tus pies o detrás de los ojos; un dolor de cabeza es una sensación, la sensación de hambre es una sensación.

Permite que la sensación presente o el conjunto de las sensaciones presentes aparezcan tal como son.

Por mundo quiero decir: Visiones, texturas, sonidos, olores y gustos; esto es todo lo que conocemos del mundo: Vistas, texturas, sonidos, olores y gustos.

Es importante decir que en este estadio lo que hacemos aquí es una exploración de nuestra experiencia; no es una investigación filosófica, es una exploración experimental. Comprueba todo lo que digo con tu experiencia, solo podemos saber si algo es cierto o no contrastándolo con nuestra propia experiencia.

Permite que el espectro total de la experiencia aparezca tal como es, pensamientos e imágenes, sensaciones corporales: Vistas, sonidos, gustos, texturas y olores.

En el futuro y para hacerle la tarea más fácil al traductor hablaremos de pensamientos, sensaciones y percepciones. Los pensamientos: Eso es la mente. Las sensaciones: Eso es el cuerpo. Y las percepciones: Eso es el mundo.

Ahora pon tu atención, por turnos, en cada una de ellas... Y hazte la pregunta: ¿Qué es lo que conoce o es consciente de mis pensamientos, sensaciones y percepciones?

Cuando un pensamiento o imagen aparece es conocido o experimentado; cuando una sensación corporal aparece es conocida, y de la misma manera ocurre con las percepciones del mundo.

¿Qué es eso que conoce o es consciente de ello? No pienses acerca de esto; ve a aquello, sea lo que sea, que es consciente de tu experiencia, y no digas: “No lo sé”.

Sea lo que sea que conoce o es consciente de nuestra experiencia, eso es a lo que nos referimos como “yo”. Es obvio que soy yo el que conoce o es consciente de mis pensamientos e imágenes, es obvio que soy yo el que siente las sensaciones cosquilleantes y táctiles de la planta de mis pies, y es obvio que soy yo quien oye estas palabras o ve estas vistas.

¿Qué es eso a lo que nos referimos como “yo”? No contestes esta pregunta con una palabra; ya sé que todos conocéis la respuesta correcta, contéstala en tu experiencia. Ahora mismo estás experimentando la mente, el cuerpo y el mundo: Pensamientos, sensaciones y percepciones. ¿Con qué?

Los pensamientos y las imágenes están continuamente apareciendo y desapareciendo; pero aquello, que sea que los conoce o que es consciente de ellos, no está apareciendo y desapareciendo con ellos.

Las sensaciones corporales están siempre apareciendo y desapareciendo, moviéndose y cambiando, pero aquello que es consciente o las conoce no aparece ni desaparece, no se mueve ni cambia con ellas; comprueba con tu experiencia todo lo que aquí se dice.

Y el mundo que son visiones, sonidos, texturas, sabores y olores, siempre está apareciendo, desarrollándose y desapareciendo, pero aquello que conoce el mundo ni aparece ni se desarrolla ni desaparece con él.
Todo pensamiento sensación o percepción que hayamos tenido ha desaparecido; incluso desde que nos hemos sentado aquí numerosos pensamientos, sensaciones y percepciones han aparecido y desaparecido.

Nada de lo que seamos conscientes ha permanecido, pero hay un elemento de nuestra experiencia que no cambia, no aparece, se mueve o desaparece y es el conocer de ello. Los pensamientos, sensaciones y percepciones están continuamente desapareciendo pero tú, yo, aquél o aquello que es consciente de ellos, nunca ha aparecido o desaparecido en tu vida.

En tu propia experiencia jamás hubo un momento en el que tú no estuvieras presente. Eres el testigo de los pensamientos, sensaciones y percepciones que aparecen, cambian y desaparecen, pero nunca te has experimentado a ti mismo -aquél que es consciente de tu experiencia- apareciendo y desapareciendo. Todo aquello de lo que podemos ser conscientes puede ser separado de nosotros, se nos puede quitar, retirar.

¿Cuál es el único elemento en tu experiencia que ha permanecido contigo a través de toda tu vida? No digas: “No lo sé”; lo conoces más íntimamente que cualquier otra cosa que puedas conocer. Se conoce él mismo más íntimamente de lo que pueda conocer otra cosa. ¿Qué es esto?